Ludmila Pérez, una niña de solo 11 años, oriunda de Santa Fe, se convirtió en la figura de la noche al salir a la pista de Bailando para cantar un clásico melódico de los años noventa.
La nena le puso la voz a "Melodía desencadenada", una de las canciones más románticas de la historia de la música, recordada por ser la cortina musical de la película "Ghost". Como broche de oro, pegó otro temazo de aquellos: "I will always love you", la canción de El guardaespaldas.
Con su potente voz y sus agudos, demostró que es una gran cantante en un cuerpo de niña.
San Juan 8
>
Espectáculos