Sin signos de violencia
Uno de los aspectos que más llamó la atención de los investigadores es que no se detectaron daños ni signos de violencia en puertas, ventanas ni accesos al inmueble. Los primeros peritajes realizados por Criminalística refuerzan la hipótesis de que el ingreso se habría producido sin forzar cerraduras.
Esta modalidad llevó a los investigadores a presumir que el robo habría sido planificado y que el autor o los autores conocían la rutina de la propietaria, así como la existencia y ubicación de las joyas dentro del departamento.
Hipótesis bajo análisis
Con el avance de las tareas investigativas, la Policía maneja dos líneas principales: que los responsables contaran con copias de las llaves, o que se trate de personas con acceso o vínculo previo con la víctima.
Por estas características, no se descarta la participación de alguien del entorno cercano, aunque por el momento no hay imputados ni detenidos.
En el lugar trabajó intensamente personal de Criminalística, que realizó el levantamiento de rastros y pericias con el objetivo de identificar a los responsables. La causa quedó en manos de la UFI de Delitos, que continúa con la recolección de pruebas y testimonios.
Hasta el momento, el robo permanece sin esclarecimiento, mientras los investigadores avanzan en el análisis de movimientos, contactos y posibles sospechosos.