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Cayó una denuncia por sextorsión: tras 3 meses, la Justicia desestimó el caso

Una joven acusó a su exnovio de 21 años de difundir videos íntimos, pero las pericias informáticas no hallaron nada. Tras tres meses, la fiscalía desestimó la denuncia por falta de pruebas.

Una denuncia por presunta sextorsión terminó desmoronándose luego de tres meses de investigación. Todo había comenzado cuando una adolescente de 17 años acudió junto a su mamá a la UFI ANIVI el 1 de septiembre, convencida de que su exnovio —un joven de apellido Aballay, de 21 años, trabajador de una barbería en Rawson y activo en TikTok— podía estar difundiendo videos sexuales que, según contó, se habían grabado durante la relación.

El temor de la chica disparó la intervención judicial inmediata. La fiscalía abrió una investigación preliminar por un posible caso de sextorsión, obtuvo órdenes de allanamiento y el 2 de septiembre irrumpió en la casa del joven y en la barbería donde trabaja. Secuestraron celulares, notebooks, una cámara del local y otros dispositivos. Además, se impuso una prohibición de acercamiento de 90 días mientras avanzaban las medidas.

En paralelo, Aballay se presentó de forma voluntaria junto a su abogada, María Filomena Noriega, y negó categóricamente poseer imágenes o videos íntimos de su expareja. Los equipos incautados fueron sometidos a pericias por la División Análisis y Apoyo Tecnológico, cuyo informe terminó siendo determinante: no había ningún archivo vinculado a la denunciante ni indicios de difusión en redes. El material hallado correspondía a terceros adultos sin relación con el caso.

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Con la denuncia analizada, las declaraciones tomadas y la prueba técnica sobre la mesa, la fiscal Andrea Insegna concluyó que no existía ningún hecho penalmente relevante. Esta semana solicitó desestimar la causa, notificar a las partes y ordenar la devolución de todos los dispositivos secuestrados una vez que la resolución quedara firme.

El caso, que al inicio fue tratado como un posible episodio de sextorsión o pornovenganza, terminó siendo archivado tras comprobarse que el joven denunciado no tenía ningún video íntimo de la adolescente ni había difundido material en redes sociales.