Boca cayó ante Independiente y cerró un semestre para el olvido, sin títulos, sin competencias internacionales y sin un técnico confirmado.
Boca cerró un semestre para el olvido. La derrota por 1-0 ante Independiente en la Bombonera marcó no solo la eliminación del Torneo Apertura, sino también el final de una etapa que deja al club sin títulos, sin clasificaciones y con más dudas que certezas de cara al futuro inmediato.
El equipo dirigido por Mariano Herrón, que asumió de manera interina tras la salida de Fernando Gago y cuyo ciclo parecía llegar a su fin con el final del torneo, sigue sin reemplazo. Si bien estaba estipulado que su etapa finalizara tras la última fecha, por el momento continuará al frente del grupo, al menos hasta que el Consejo de Fútbol, liderado por Juan Román Riquelme, defina al nuevo entrenador.
Después de la derrota, y con un clima cargado de tensión y frustración, el entrenador decidió darle el día libre al plantel. Boca no tiene compromisos oficiales en el corto plazo: el próximo partido será recién el 16 de junio ante Benfica, en Miami, por la primera jornada del Grupo C del Mundial de Clubes 2025. Con casi un mes de inactividad, el foco se traslada a la planificación del segundo semestre.
En conferencia de prensa, Herrón evitó hablar de su continuidad. “No hablé nada. Vamos a ver qué piensan en estos momentos”, declaró, aunque se mostró dispuesto a mantenerse en el cargo hasta que se cierre la llegada del nuevo DT.
Por ahora, se espera que Boca retome los entrenamientos el miércoles con Herrón al mando. Mientras tanto, el Consejo de Fútbol trabaja en silencio, sabiendo que la decisión que tomen será clave para encarar una parte del año donde el club necesita reencontrarse con la competitividad y el protagonismo perdido.
