Las condiciones climáticas posteriores a la desaparición, con lluvias que limitaron el tránsito, complicaron aún más la recolección de indicios.
Desde la denuncia presentada por la familia de Daiana, la policía mantuvo una búsqueda ininterrumpida, extendiendo las tareas hasta la madrugada y realizando allanamientos a personas vinculadas con la joven. “Se hicieron allanamientos a personas que tienen algún vínculo con la joven desaparecida”, detalló Blasón a ElOnce.
La investigación, coordinada junto a los fiscales Emilce Reynoso y Sergio Saliski, del Ministerio Público Fiscal de Rosario del Tala, abarcan el análisis de cámaras de seguridad, entrevistas a posibles testigos y pericias sobre teléfonos y vehículos.
En este contexto, las autoridades detuvieron a un hombre de 55 años que mantenía un presunto vínculo con Mendieta. Según informó el jefe de Policía del Departamento de Tala, Pedro Silva, el detenido -que se lo conoce bajo el alias de “Pino”- estuvo en contacto con la joven poco antes de su desaparición.
Esta línea de investigación condujo al allanamiento de un galpón alquilado por el sospechoso en la esquina de Moreno y Pedro Lucero, en el mismo pueblo, el lunes siguiente a la denuncia.
Durante el allanamiento, que se realizó bajo la orden de la jueza de Garantías Silvina Graciela Cabrera, el individuo intentó manipular un arma de fuego y fue aprehendido por resistirse a la intervención policial. “Quedó detenido por esa resistencia”, agregó Blasón al medio local.
Las hipótesis que se manejan en la causa son diversas y ninguna ha sido descartada. El comisario subrayó que se investigó la simulación de un escenario para encubrir un posible femicidio.
Un dato relevante aportado por Silva es que “no es la primera vez que Daiana se ausenta del domicilio”, aunque remarcó que “nunca antes había cortado toda comunicación con su familia”, lo que motivó la denuncia inmediata y encendió las alarmas en el entorno de la joven.