El juez en lo Contencioso Administrativo y Tributario de la Capital Federal, Guillermo Scheibler, ordenó adecuar los documentos de identidad de un travesti y modificar su nombre originario por otro femenino.
"
El juez en lo Contencioso Administrativo y Tributario de la Capital Federal, Guillermo Scheibler, ordenó adecuar los documentos de identidad de un travesti y modificar su nombre originario por otro femenino.
La decisión del magistrado, que se inscribe en la nueva jurisprudencia de reconocer como del género femenino a los travestis, fue tomada ante la acción de amparo promovida por Darío Angel S.
Basado en los elementos de prueba reunidos en el expediente, el juez concluyó que S. nació varón, pero su identidad de género es femenina y ordenó que se anotara el apellido precedido por los nombres "Paula Melina".
S. acudió a la justicia de la ciudad luego de que el 4 de noviembre último la delegación del Registro de Estado Civil y Capacidad de las Personas ubicado en Beruti 3.325 de esta Capital, se opusiera a anotar el cambio de nombre y sexo registral.
S., de 20 años, quien para fundar su derecho invocó el derecho constitucional que impide que alguien sea privado de lo que la ley no prohibe, expuso que nació en el conurbano bonaerense, donde se crió en un hogar tradicional junto a sus padres y tres hermanos.
La joven contó que "desde muy temprana edad sintió un deseo irrefrenable de vestirse y relacionarse conforme el sexo femenino" y que por eso "comenzó una serie de consultas médicos-psicológicas y un tratamiento de sustitución hormonal por ingesta autoindicada, al no encontrar respuesta en el servicio público de salud".
Ese tratamiento "produjo cambios apreciables y junto a la colocación de implantes logró su finalidad de alcanzar una razonable feminización física", relató la demandante.
Fuente: Télam