Los puntazos fueron claros y llegaron luego del fracaso de una posible alianza con Sergio Massa. Cristina quebró el PJ y ni ella, con los intendentes fieles, ni Randazzo pudieron dar el batacazo en provincia de Buenos Aires. Mientras que en San Luis la perpetuidad de los Rodríguez Saá empezó a temblar. Ni hablar de Juan Manuel De la Sota y Juan Schiaretti en Córdoba.
Sin dudas la conducción del PJ mostró que fracasó contundentemente este 13 de agosto en las PASO de la Argentina. Ahora aparecen nuevos nombres, caras renovadas respaldadas por los votos. La política conciliadora se erige como la más adecuada. En este escenario se perfilan como referentes Sergio Casas, Sergio Uñac y Juan Manuel Urtubey. Habrá que ver si los viejos justicialistas escuchan sus propios consejos de buscar el consenso y escuchar a las urnas.