Águila coronada El Águila Coronada (Harpyhaliaetus coronatus) se encuentra catalogada como especie en Peligro de Extinción según su estatus internacional y nacional. Se trata de un ave de gran tamaño, generalmente solitaria. Su vuelo es majestuoso y alterna aleteos con planeos. Se alimenta de una gran variedad de presas como armadillos, reptiles, zorrinos, comadrejas, aves y ocasionalmente carroña. Habita en el Sudeste de la provincia, en la provincia fitogeográfica del Monte, en particular en bosques maduros con árboles de gran tamaño. En los últimos años se han movilizado los expertos que trabajan con la especie, donde se acordaron algunas prioridades de conservación e investigación en base a las siguientes amenazas: pérdida de hábitat, persecución directa, electrocución en tendidos eléctricos, mascotismo y tráfico ilegal. Instituciones gubernamentales, privadas y ONGs trabajan de forma articulada y activamente para su conservación a nivel nacional e internacional. Cisne cuello negro El Cisne de cuello negro es natural de América del Sur, y a su vez, es el único representante del género Cygnus que habita en Sudamérica. Se distribuye desde el sur de Brasil hasta Tierra del Fuego. Habita en cuerpos de agua fresca, continentales (dulces y salobres) y marinas, de muy baja profundidad, relativamente protegidas y tranquilas. Se agrupa en grandes bandadas dispersas en ciertos sitios de nidificación. Su alimentación consiste en vegetales acuáticos, algas marinas y pastos. Es posible que también coma pequeños invertebrados en el agua y que complemente su dieta con algunos insectos. El cisne de cuello negro ejerce un impacto sobre la vegetación acuática que forma la pradera sumergida, regulando la biomasa de plantas al alimentarse de ellas, frenando de esta manera los fenómenos de zonación vegetal y sucesión ecológicos, por lo que ayuda a mantener los ecosistemas húmedos en estadios primarios de más alta productividad y a preservar estos ambientes. Además, constituye una herramienta bioindicadora muy útil de micro y macro cambios ambientales. Su etología, hábitos alimentarios y tipo de ambientes en que vive, indican problemas de contaminación ya existentes en cuerpos de agua fresca, causados por la agregación de materia orgánica y otros nutrientes provenientes de las actividades humanas. También las variaciones del número de individuos en una región determinada y migraciones a lugares no habituales, nos indican un próximo período de sequía y su grado de severidad.