El brutal ataque que sufrió una mujer junto a sus hijos de 9 y 4 años por parte de su expareja, que les disparó y luego se gatilló en la cabeza, en Villa Don Pablo, Rawson, conmociona a los sanjuaninos. Con el correr de las horas y el avance de la investigación, se conocieron detalles de qué sucedió anoche, cuando el sujeto intentó matar a sus hijos y a la madre de ellos (su expareja), y luego intentó quitarse la vida, sin éxito.
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Desde el Ministerio Público Fiscal informaron cómo era la relación del sujeto con su familia. En su denuncia, la víctima contó la situación familiar y explicó que había solicitado medidas ante el hostigamiento y que ya había sufrido abusos sexuales por parte de quien era su expareja.
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La mujer y el acusado tuvieron una relación de 15 años aproximadamente, de los cuales 8 convivieron, tiene dos hijos en común de 9 y 4 años (este último padece autismo). La victima describió al denunciante como muy celoso y controlador.
En agosto de este año, le pidió la denunciante que se vaya de la casa que no sigan juntos, esto se dio porque descubrió una infidelidad de parte del imputado. Este comenzó a llevarse de a poco sus cosas, y a mediados de octubre radicó una petición de medidas en la Comisaria 25 dado que eran constantes los hostigamientos, no habiendo hasta la fecha notificación de medidas.
Este miércoles, alrededor de las 16, tuvieron una charla los dos, en donde él le manifiesta que quizás tenía un trabajo en Jáchal, que se iba a ausentar por un mes, que quería ver a los chicos y hablar del tema de la comida y del dinero y quedan de acuerdo para juntarse en la casa a las 20.30. El señalado llegó cerca de las 21.30, se llevó a los chicos a tomar un helado y volvió a las 23. Los chicos comieron mientras el acusado seguía allí, tomando una cerveza. Luego los chicos salieron a jugar con su padre y al no lograr que el menor se duerma, le dijo que hablen porque se había hecho ya muy tarde.
Ambos se sentaron en el comedor y hablaron sobre una posible cuota alimentaria, y de la nada comenzó a decirle que no metiera a cualquiera a la casa, que él estaba todas las noches afuera de la casa. Como la charla seguía en este sentido le pidió que se vaya que, sino llamaría a la Policía y, en ese momento, el imputado sacó un arma de fuego de su bolsillo, le apuntó a la víctima a la cara y le dijo “te voy a matar a vos y a los niños, vamos a salir todos muertos de aquí”.
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El niño más chico seguía jugando sin darse cuenta de lo que ocurría. La victima tomó una silla de caño y se trató de cubrir, y gritó el nombre de su vecina. Por los gritos, el hijo más grande se despertó e intentan refugiarse los tres en la habitación, cerrando la puerta, la cual logró abrir el imputado.
Llevó a la mujer de los pelos al baño y, como el niño más grande estaba abrazado a su madre también es arrastrado al baño, el imputado todo el tiempo los apuntaba. Cuando se dio cuenta el imputado que la víctima a escondidas llamó al 911, los sacó del baño y los tres (madre y sus hijos) se tiran en la cama de la habitación, el hijo mayor le dijo al padre que por favor no fuera malo. Luego de esto, apuntándole, le dijo a la denunciante que escribiera en una hoja de papel el nombre de todos los hombres con los que había estado. Cuando el imputado se dirigió a cerrar la puerta, la víctima intentó escapar y ahí escucha los disparos, siente algo en la cabeza luego se desvanece unos segundos.
Cuando la mujer recobró el conocimiento y ve cómo le apuntaba a su hijo menor con el arma y ve a su hijo mayor tirado en el piso y advierte que éste tenía una herida en la cabeza, trató de sacar al niño de 9 años arrastrándolo hacia afuera. Luego entró a la habitación y sacó al menor en brazos.
El imputado estaba tirado en el suelo y desde ahí le volvió a gatillar sin salir el disparo. La víctima aclaró que mientras disparaba se drogaba metiéndose un polvo blanco en la nariz.
Al final, la mujer agregó en su testimonio que también fue víctima de varios abusos sexuales pero que quiere ampliar en otro momento.
Intervención de las autoridades
Alrededor de las 2 de la madrugada de este jueves, tomó conocimiento UFI CAVIG por un llamado al 911 de una vecina de la denunciante, quien los puso en conocimiento de una pelea y disparos.
Se hizo presente personal Policial en la Villa Don Pablo, en Rawson, quien encontró a la mujer herida y consciente; al niño de 4 años llorando y al niño de 9 años, tirado en el piso, inconsciente.
La denunciante les dijo que el sujeto que estaba adentro les había disparado. Ingresaron los uniformados y observaron a un hombre tirado en el baño y un revolver a calibre 22.
Inmediatamente llamaron a Emergencias médicas y, al hacerse presente la ambulancia, trasladó a la mujer y a los dos niños al hospital Rawson, nosocomio al que después fue trasladado el acusado.
Se hicieron presentes en el lugar fiscales de CAVIG y de Delitos Especiales y se dio intervención a Criminalística para resguardo y levantamiento de elementos en la escena del crimen.
Secuestraron el arma de fuego calibre 22, conteniendo en su interior 7 vainas servidas; y otros elementos como ropa de cama, etc.
Dentro de los secuestrado, también hay un envoltorio con una sustancia blanca en la billetera del imputado, y por esto se le dio intervención a Drogas Ilegales, quien realizó una prueba de campo que arrojó resultado positivo a cocaína.
Un vecino Subcomisario de Comando Radioeléctrico escuchó -previo a la llegada de la policía- los gritos y pedidos de auxilio y logró ingresar al patio común que hay en donde vive la denunciante y observó -según su declaración- cómo le disparó la mujer y a los dos niños.
Varios testigos declararon que escucharon los disparos y gritos previos.
Cómo se encuentran las víctimas
El niño de 9 años está en grave estado, con pronóstico reservado. Le hicieron una intervención quirúrgica para desinflamar la presión intracraneal.
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En tanto que el niño de 4 años y su madre, se encuentran fuera de peligro.
El acusado continúa internado y fuera de peligro. Está en calidad de detenido en la internación, con custodia policial, según confirmaron fuentes judiciales.
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