Durante la madrugada, el Gabinete Criminalístico trabajó sobre la escena del crimen recolectando vainas servidas, prendas de la víctima y tomando testimonios. También se revisaron las cámaras de seguridad ubicadas en la zona, que captaron el momento del ataque y permitieron reconstruir la secuencia de los hechos.
Con base en esas imágenes y los relatos de los vecinos, los investigadores lograron individualizar al presunto autor, quien se encuentra prófugo. Durante el fin de semana se realizaron múltiples allanamientos en distintos puntos del departamento, aunque hasta el momento no hubo resultados positivos.
Fuentes judiciales confirmaron que el sospechoso fue reconocido por su entorno y que existiría un vínculo previo entre él y la víctima. Los fiscales que intervienen en la causa no descartan ninguna hipótesis y trabajan sobre distintas líneas de investigación para determinar el móvil del ataque.
“Se trata de una persona ya identificada y con antecedentes. Estamos trabajando de manera coordinada con distintas unidades operativas para dar con su paradero”, señalaron desde la Secretaría de Seguridad.
Mientras tanto, el cuerpo de Díaz fue entregado a su familia y el barrio permanece conmocionado por el violento hecho, que se suma a otros episodios recientes ocurridos en la zona norte del Gran San Juan. La Policía mantiene los operativos activos y la Justicia espera avances en las próximas horas.