Qué efectos produce el alcohol en la respuesta sexual
Es frecuente que el consumo excesivo de alcohol provoque en los hombres disfunción eréctil al inhibir el correcto funcionamiento del sistema nervioso central. Según afirma Francisca Molero, presidenta de la Federación Española de Sociedades de Sexología (FESS), con esta sustancia “dejamos de percibir las sensaciones eróticas y se puede producir un problema de erección”.
La especialista dijo que puede haber efectos encadenados, aunque esto dependerá del consumo de alcohol, muy incorporado en la sociedad por ser un “elemento facilitador” de las relaciones sociales. En este sentido, Molero advierte: “Lo que suelen hacer algunos jóvenes es utilizar el alcohol y, de forma paralela, algún inhibidor de fosforilasa como el ‘viagra’, precisamente porque saben que pueden tener problemas de erección. De hecho, los consumidores de ‘viagra’ mayoritariamente son jóvenes porque no tienen factores orgánicos de riesgo”.
El consumo reiterado hace que estas personas entren en una dinámica en la que disminuye su seguridad sexual, que acaba dependiendo de causas externas, como pueden ser el alcohol y los fármacos. “Esto sí que es un verdadero problema porque a largo plazo afecta no solo a la salud mental, también puede provocar alteraciones hepáticas importantes”, aseveró la sexóloga.
Si nos centramos en los problemas psicológicos que esto desencadena, Molero detalla que se genera un sentimiento de frustración cuando no se recurre a estas sustancias, además de ansiedad anticipatoria y miedo a la hora de enfrentarse a relaciones sexuales. “Llega un momento en el que para ellos la sexualidad se convierte en un problema que acaba afectando a todas las partes de la respuesta sexual, como puede ser el deseo, no solo la excitación”, resume la presidenta de la FESS.
Un consumo excesivo de alcohol tiene consecuencias
Por otra parte, las expertas señalan que un consumo excesivo de alcohol puede producir una eyaculación tardía o que ni siquiera se produzca. A pesar de que a priori esto puede resultar positivo, lo cierto es que al hombre le cuesta mucho más alcanzar el orgasmo y la relación sexual es mucho menos placentera.
En cuanto a los efectos físicos en las mujeres, Molero indica que disminuye la lubricación porque “están mucho menos centradas en sentir los estímulos eróticos, que son los que activan realmente la respuesta sexual”. Además, hay que tener en cuenta que practicar sexo tras haber ingerido alcohol aumenta el riesgo de contraer una infección de transmisión sexual (ITS) porque las personas son menos conscientes en tomar las precauciones pertinentes. “Si alguien quiere tener relaciones sexuales satisfactorias, el alcohol es en absoluto un elemento facilitador de la satisfacción”, concluye Molero.