La clave para lograr unas papas bravas perfectas está en freír las papas hasta que estén doradas por fuera y tiernas por dentro, y en preparar una salsa bien equilibrada, que combine el sabor ahumado del pimentón con un nivel justo de picante.
En total, esta receta de papas bravas toma aproximadamente 45 minutos:
- Preparación de las papas: 10 minutos
- Cocción de las papas: 25 minutos
- Preparación de la salsa brava: 10 minutos
- 4 papas medianas
- Aceite de oliva (para freír)
- 1/2 taza de tomate triturado
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- 1/2 cucharadita de pimentón picante
- 1 diente de ajo, picado
- 1 cucharadita de harina
- 1/2 taza de caldo de pollo o vegetales
- Sal al gusto
- Pelar y cortar las papas en trozos medianos, procurando que sean del mismo tamaño para una cocción uniforme.
- Calentar abundante aceite en una sartén profunda o freidora a fuego medio-alto.
- Freír las papas en tandas para evitar que se amontonen, hasta que estén doradas y crujientes. Retirarlas y colocarlas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
- Para la salsa brava, calentar una cucharada de aceite de oliva en una sartén pequeña y sofreír el ajo picado hasta que esté ligeramente dorado.
- Añadir la harina y remover constantemente durante un minuto para que pierda el sabor a crudo.
- Incorporar el tomate triturado, los pimentones dulce y picante, y cocinar a fuego bajo durante 5 minutos.
- Agregar el caldo poco a poco, removiendo para integrar. Cocinar hasta obtener una salsa espesa. Corregir la sal si es necesario.
- Servir las papas calientes en un plato y cubrirlas con la salsa brava.
Esta receta rinde aproximadamente 4 porciones como tapa o acompañamiento.
Cada porción de papas bravas contiene aproximadamente:
- Calorías: 280
- Grasas: 14 g
- Grasas saturadas: 2 g
- Carbohidratos: 35 g
- Azúcares: 3 g
- Proteínas: 3 g
Cabe señalar que estas son estimaciones, y los valores nutricionales precisos dependen de los ingredientes específicos utilizados en la preparación y las cantidades de cada porción.
Las papas bravas se pueden conservar en la nevera por hasta 2 días, aunque es recomendable consumirlas recién hechas para disfrutar de su textura crujiente. La salsa se puede almacenar por separado en un recipiente hermético por hasta 4 días.
FUENTE: Infobae