Algunos de los principales elementos del efecto viernes incluyen:
- Anticipación de tiempo libre. La posibilidad de dedicar tiempo a actividades no laborales.
- Interacción social. La predisposición a ver amigos o familiares.
- Recompensa mental. La sensación de haber completado la semana laboral y recibir “una pausa”.
Así, este día se convierte en un símbolo de satisfacción personal y emocional, ya que brinda una recompensa a los esfuerzos invertidos durante la semana.
La resaca emocional de los domingos
En contraste, los domingos suelen despertar una sensación de ansiedad anticipada que afecta el estado de ánimo. Este sentimiento está relacionado con la “resaca de domingo”, una especie de tristeza que emerge al pensar en el regreso a las responsabilidades. La revista “Psychology Today” explica que, aunque el domingo es parte del descanso, su cercanía con el inicio de la semana laboral hace que se perciba como el fin de la libertad. Además, la diferencia en cómo se perciben viernes y domingo se debe a varios factores:
- Expectativas de rutina. El domingo se ve como el fin de un período de libertad.
- Preparación para el trabajo. Las personas suelen hacer tareas o planificar la semana, lo que genera estrés.
- Diferencia en actividades sociales. Las reuniones son menos comunes, lo que incrementa la introspección.
Qué hacer para mejorar el ánimo del domingo
Aprovechar el domingo de manera positiva puede ayudar a reducir la ansiedad anticipatoria y equilibrar el estado emocional antes del inicio de la semana. Según un informe de “Harvard Business Review”, realizar actividades significativas y planear el tiempo libre ayuda a enfrentar el cambio de lunes a viernes de forma más equilibrada. Estas son algunas sugerencias para mejorar el ánimo del domingo y hacer de este día una experiencia más placentera:
- Establecer una rutina relajante. Comenzá el día con un desayuno nutritivo y una actividad que te haga sentir bien, como meditar, leer o dar un paseo al aire libre. Este enfoque te permitirá iniciar el día con energía y claridad mental.
- Dedicar tiempo a tus pasatiempos. Reservar un momento para disfrutar de actividades que amas, ya sea pintar, tocar un instrumento o practicar deporte, puede elevar tu estado de ánimo y darte una sensación de satisfacción personal.
- Conectarse con seres queridos. Aprovechá el tiempo para pasar momentos de calidad con familia y amigos. Ya sea una llamada, un almuerzo juntos o simplemente un intercambio de mensajes, la conexión social es fundamental para el bienestar emocional.
- Planificar la semana. Tomate un tiempo para organizar tus tareas y establecer prioridades para los próximos días. Esto puede ayudarte a sentirte más preparado y menos abrumado cuando llegue el lunes.
- Practicar la gratitud. Reflexioná sobre las cosas positivas que te han pasado durante la semana y anotá al menos tres de ellas. Esta práctica simple puede cambiar tu perspectiva y hacer que valores más lo que tienes.
- Evitar el trabajo. Tratá de desconectarte de las obligaciones laborales durante el domingo. Establecer límites claros entre el tiempo personal y el trabajo es crucial para mantener un buen equilibrio en la vida.
- Disfrutar de la naturaleza. Si es posible, salí a la naturaleza. Ya sea un parque, una playa o simplemente una caminata por tu vecindario, el aire fresco y el contacto con el entorno natural pueden ser muy revitalizantes.
- Prepararse para el lunes. Podés preparar algunos elementos para la semana, como organizar tu ropa, planificar tus comidas o hacer una lista de compras, pero sin caer en el estrés. Esto debe ser algo ligero y sin presión.
Al incorporar estas prácticas a tu domingo, podrás transformarlo en un día de renovación y alegría, permitiéndote enfrentar la nueva semana con una actitud más positiva y equilibrada.
FUENTE: TN