Tras cuatro jornadas de intensa labor, finalizaron hoy sin éxito los rastrillajes y excavaciones en busca del cuerpo de Jorge Julio López en el parque Pereyra Iraola, luego de que un testigo de identidad reservada aseguró que allí estaban los restos del albañil desaparecido en 2006.
Su hijo Rubén señaló que "lamentablemente la búsqueda resultó negativa" y sostuvo que "no estamos de acuerdo como se manejó todo esto", aunque destacó "el grado de profesionalismo con que se trabajó buscando a mi padre".
"Teníamos la esperanza de que este podría haber sido el último" procedimiento, dijo López, quien no obstante señaló que "apelamos a quienes sepan qué ha sido de Julio López, que sepan que la familia los va a apoyar y a ayudar para que cobren la recompensa" de un millón y medio de pesos.
Reveló que la búsqueda cubrió un sector de seis mil metros cuadrados, más amplio del que el denunciante demarcó, "y hoy se trabajó con el georadar en dos casas linderas y en pozos ciegos, también con resultados negativos".
"Desde la Fiscalía y todos los investigadores se han portado mil puntos", comentó el hijo de López, quien aseguró que "se le dio entidad a esta denuncia como a otras insólitas, un tanto alocadas, otras más o menos ciertas", aunque admitió que en esta ocasión "había ansiedad".
Nilda Eloy, como López, querellante y testigo en la causa contra el represor Miguel Etchecolatz, e integrante de la Asociación de Ex Detenidos Desaparecidos, reiteró las sospechas sobre el testigo protegido: "La conclusión es que el testimonio fue falso ya que toda la búsqueda dio negativa", subrayó.
"Uno siempre tiene expectativas de que aparezca Julio, pero no se puede dejar de sospechar en la forma de presentación de la denuncia; llegó a la causa con un abogado hablando en la prensa, con el Ministerio de Justicia y Seguridad, e incluso el gobernador Daniel Scioli la avaló sin que cumpla el cauce normal de cualquier denuncia, que es plantearla ante la Justicia".
En tanto, la Fiscalía federal de La Plata, a cargo de Carlos Dulau Dumm, espera reunirse próximamente con el testigo para que amplíe su declaración, pues en su primer testimonio el señalamiento de la zona había sido ambiguo y poco preciso.
Las nuevas búsquedas empezaron el miércoles último luego de que el testigo indicó que sabía dónde estaba el cuerpo del albañil, desaparecido desde el 18 de septiembre de 2006 mientras se realizaba el juicio a Etchecolatz -luego condenado- por delitos de lesa humanidad cometidos en la última dictadura.
El testigo había sido citado ayer pero, pero según informó su abogado a la Fiscalía, no se iba a presentar por razones de seguridad, por lo que se acordó un nuevo encuentro.
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