La obra requiere una inversión de 2.500 millones de dólares que con los intereses se convertirán en unos 3.000 millones totales. Este monto la ubica en la inversión privada más grande en lo que va del siglo y recién será desplazada cuando se concrete el proyecto de la planta de LNG.
El oleoducto Vaca Muerta Sur, o proyecto VMOS, será realizará en dos tramos, uno largo en el que hay dos empresas compitiendo por ganar y otro corto en el que es factible el ingreso de jugadores más pequeños. Los nombres de los que ganen la licitación se conocerá la semana próxima.
Los caños es un tema resuelto, la licitación la ganó Tenaris. Se trata de caños de 30 pulgadas lo que lo convertirá en el oleoducto más grande de la Argentina.
“El proyecto VMOS ya se presentó al Régimen de Incentivos para grandes inversiones (RIGI) y se convirtió en el primer proyecto de la industria de O&G. Este es uno de los proyectos de infraestructura privado más importantes de la Argentina de los últimos 20 años”, indicó a la prensa Horacio Marín, CEO de YPF.
El ingreso al RIGI le permitirá financiar en un 70% la obra. Se estima que los 2.000 millones que se financiarán será en su mayoría en la plaza internacional y en unos 500 millones de dólares en el local.
Los “dueños” de la obra serán YPF y Pluspetrol en forma mayoritaria junto con Vista, PAE, Pampa, Chevron, y Shell.
Ya se creó la SPV a la que, luego de negociados los contratos definitivos, adhiere el resto de los socios
“Con el trabajo que hicimos desde que llegamos, ahorramos unos 500 millones de dólares y bajamos los plazos de construcción del proyecto”, indicó Marín aunque se estima que el retraso de las decisiones implica una pérdida de 20 y 40 millones de dólares por día.
El desembolso más fuerte deberá hacerse entre el año próximo y el 2026.
“El proyecto VMOS convertirá a la Argentina en uno de los principales exportadores de la región y aportará divisas y trabajo al país”, aseguró Marín y agregó que “la magnitud de este proyecto lo convierte en trascendental para la Cuenca Neuquina. Este ducto permitirá más que duplicar la posibilidad de evacuación de petróleo de Vaca Muerta”.
Se proyecta que la cuenca neuquina puede producir 1,5 millón de barriles al año.
Se trata de un proyecto novedoso desde su constitución ya que hasta ahora la industria estaba acostumbrada a trabajar de forma individual mientras que con esta obra lo harán en forma conjunta, esto les garantiza una tarifa competitiva e igual para todos los socios.
La obra se extiende desde Loma Campana a Allen en su primer tramo, unos 130 kilómetros con un Capex de 200 millones de dólares y el segundo tramo que se se inicia en Allen hasta el puerto de aguas profundas de Punta Colorada, un tramo de 440 Km con un CAPEX de 2.500 millones de dólares. La cabezara de Allen va a ser un hub hacia los dos tramos.
Además se producirá un abaratamiento del flete que pasará a ser de entre dos o tres dólares por barril.