La técnica utilizada en esta intervención representa un gran avance frente a la cirugía convencional. La cirugía endoscópica permite realizar el procedimiento a través de pequeñas incisiones, utilizando un endoscopio —un tubo delgado con cámara y luz— para acceder y extirpar la sutura craneal fusionada de forma prematura.
Este enfoque ofrece múltiples beneficios: menor sangrado; incisiones reducidas; menor tiempo quirúrgico y de internación; disminución del riesgo de infecciones; recuperación más rápida para el paciente
Además, el procedimiento fue posible gracias a la capacitación previa del equipo médico, que entrenó con modelos de simulación, destacando así la importancia de implementar próximamente un área de simulación permanente dentro del hospital.
El equipo quirúrgico estuvo conformado por la Dra. Carolina Maldonado Alejos, el Dr. Patricio Jácamo y el Dr. Emilio Pellereti, neurocirujano pediátrico del Hospital Notti de Mendoza, quien aportó su experiencia al procedimiento. También participaron activamente los servicios de Neurocirugía, Neonatología, Quirófano Central, Anestesiología, Instrumentación Quirúrgica y Enfermería, entre otros.
Tras la cirugía, el bebé deberá utilizar un casco ortopédico moldeador durante algunos meses, con el objetivo de guiar adecuadamente la forma del cráneo y permitir un crecimiento cerebral normal y saludable.
Este tipo de cirugías, que aún son poco frecuentes en hospitales del interior del país, consolidan al Hospital Rawson como un referente en atención de alta complejidad, gracias al compromiso de sus profesionales, la formación continua y una infraestructura hospitalaria de vanguardia.