Cabe destacar que, se ha establecido un protocolo de ingreso y un reglamento interno que la persona debe respetar. La apertura del lugar es entre las 17 y las 18 horas y la salida está fijada a las 10 de la mañana, dos horas más tarde del horario habitual, por las bajas temperaturas del invierno. Otros aspectos fundamentales están ligados a la convivencia que, entre otras reglas, requiere respetar el aseo personal, la limpieza de su espacio (esto implica tender su cama por ejemplo) y que la persona tome contacto con el equipo profesional, integrado por psicólogos, nutricionistas, asistentes sociales- para conocer sus necesidades puntuales. Si una persona llega con alguna patología o tiene alguna demanda de salud “se tramitan los turnos o la atención hospitalaria”, explicó la subsecretaria.
La directora de Emergencia y Políticas Alimentarias, Lorena Acosta, detalló que cada persona, al ingresar, recibe, según sus necesidades, ropa de abrigo como zapatillas, campera, medias, guantes, gorro y bufanda y elementos de higiene personal, tales como jabón, shampoo, máquina de afeitar.
Se le asigna una cama con frazadas y acolchado, y un espacio de guardado de sus pertenencias, las que -por razones de seguridad- son detalladas en un acta formal.
A cada refugiado se le brinda una merienda, la cena y el desayuno, que están nutricionalmente compensados y que el personal prepara a diario según un menú establecido.
A su vez, la persona puede acceder libremente al uso de un lavarropas con secarropa, se entregan todos los insumos, juegos de mesa y televisión. Además, el este equipo técnico de cada centro también hace seguimiento de los casos, propone controles médicos y nutricionales como así también la aplicación de vacunas, e intenta buscar el acercamiento a las familias de origen, si es que las hubiera.
El objetivo de toda esta contención es brindar herramientas que posibiliten la igualdad de oportunidades para todos los ciudadanos y responder ante las necesidades básicas de las personas.
El Ministerio recuerda que si alguien encuentra en la calle a una persona, puede informar de sus necesidades de ser albergado tanto a la Policía, Bomberos, municipios o directamente al 264-4123158, que es un número de la Dirección de Emergencia y Políticas Alimentarias, habilitado las 24 horas.