Tras el operativo denominado "Rejas blancas", la Policía Federal Delegación San Juan logró desarticular una organización dedicada al acopio, distribución y comercialización de estupefacientes, cuyo líder operaba desde el Penal de Chimbas.
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"La droga que llega a San Juan en este momento, la maneja Víctor Camargo desde la cárcel", dijo el juez federal Leopoldo Rago Gallo a Canal 8.
El magistrado a cargo de la investigación, ordenó los allanamientos en los 9 domicilios ubicados en Santa Lucía, Chimbas y Rawson, en los que se encontraban bunkers y quioscos, destinados a la venta de droga al menudeo. En los operativos, los efectivos secuestraron más de 2 kilos de cocaína, 17 semillas de cannabis sativa, 1 pistola calibre 22mm., 2 vehículos, 17 celulares, 4 balanzas digitales, 1 tubo para fraccionar cocaína, 60.000 pesos en efectivo producto de la venta de los estupefacientes y demás elementos para la causa.
Por estos operativos, 5 personas de 22, 25, 28, 44 y 50 años -oriundos de Argentina- fueron detenidas. En este sentido, Rago Gallo resaltó que "se llegó a este resultado a través de las escuchas telefónicas e inteligencia que hizo la delegación sanjuanina de la Policía Federal". Y agregó que "por estos seguimientos importantes, lograron desbaratar esta banda con una cantidad importante de elementos que se utilizan para la comercialización de drogas".
Víctor Camargo
El magistrado destacó que el líder de la organización narco que lograron desbaratar está detenido desde agosto del 2017. Se trata de la tercera causa por comercialización de drogas con cumplimiento de condena efectiva.
A partir de esta última detención, es que realizaron dos procedimientos más relacionados con el implicado, en los que se secuestraron 60 kilos de droga y detuvieron a 3 personas, según declaraciones del juez.
Rago Gallo dijo que Camargo está vinculado con una red nacional de narcotráfico, que traería drogas ilegales a la provincia desde Mendoza y del norte del país.
Modus operandi
La Policía Federal Delegación San Juan informó que la forma de organización de la banda consistía en que el líder junto a otras personas detenidas en el mismo pabellón realizaban los arreglos para contratar a una persona de confianza que hacía de mula y retiraba las sustancias prohibidas desde la provincia de Mendoza para luego regresar a San Juan. Una vez allí, los estupefacientes eran entregados al encargado de su fraccionamiento, distribución entre los distintos dealers, como así también de la recaudación del dinero y su administración.
Por las tareas de campo desarrolladas por los efectivos, pudieron determinar que dicha banda se formó como una ramificación de la organización desbaratada en el año 2017 durante la "Operación V.I.P", donde se secuestraron 100 kilos de marihuana y se detuvieron a 35 personas.
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