Los empleados de la administración pública nacional no trabajarán el 31 de diciembre. Así se dispuso mediante un decreto que fue publicado este lunes en el Boletín Oficial y por el que se busca “facilitar las clásicas reuniones familiares” que se realizan con motivo de los festejos por el Año Nuevo. En ese sentido, el Gobierno “estima procedente posibilitar el acercamiento de quienes, por diversas causas, se domicilian lejos de sus seres queridos”.