Una despedida que cruzó camisetas
La despedida a Russo fue transversal. Dirigentes de River Plate, como Jorge Brito e Ignacio Villarroel, se acercaron a La Bombonera con una corona de flores azules y amarillas en nombre del club. El gesto fue correspondido por Juan Román Riquelme, quien los recibió junto a Raúl Cascini en un emotivo encuentro que reflejó respeto mutuo por encima de la rivalidad.
El plantel completo de Rosario Central, club donde Russo dejó una huella imborrable, también estuvo presente. Lo mismo hicieron delegaciones de San Lorenzo, Barracas Central y Estudiantes de La Plata, donde el exdefensor disputó más de 400 partidos como jugador.
El presidente del Canalla, Gonzalo Belloso, relató con profunda emoción los últimos momentos del DT: “Estábamos todos ahí, con su familia y un sacerdote. Rezamos el Padre Nuestro y, de la mano de su esposa, Miguel partió en paz. Fue un momento mágico”, dijo.
Un legado que trasciende
La noticia de su muerte sacudió al país futbolero. La AFA decretó un minuto de silencio en todos los partidos del fin de semana y Boca suspendió su encuentro ante Barracas Central.
“El fútbol argentino perdió a un tipo querido por todos, de los que dejan huella”, expresó Lionel Scaloni, visiblemente conmovido.
Desde Europa, Lionel Messi también lo recordó con un mensaje en redes: “Mi más sentido pésame a su familia y a toda la gente cercana”.
En la Bombonera, hinchas de Boca, Central, Estudiantes y hasta de River se mezclaron en las filas. Algunos llevaron flores, otros camisetas o banderas con mensajes como “Gracias por tanto, Miguelo” o “Tu ejemplo queda para siempre”. La emoción fue colectiva, el respeto absoluto.