El joven de 17 años, de Red Bull KTM, es el primer argentino en finalizar en los primeros puestos en el circuito del motociclismo mundial desde 2021.
Valentín Perrone, del equipo Red Bull KTM, hizo historia en Assen: finalizó tercero en la carrera de Moto3 en Países Bajos y es el primer argentino en subir a un podio en el circuito del motociclismo mundial desde 2021.
Con apenas 17 años, el piloto que nació en España y tiene raíces argentinas consiguió su primer podio en Moto3, nada menos que en el circuito de Assen, escenario histórico del calendario mundial.
El argentino terminó en el tercer lugar, detrás de José Antonio Rueda y David Muñoz, y celebró su actuación con una mezcla de euforia y emoción que lo llevó hasta las lágrimas. Su presencia en el podio no solo lo llenó de orgullo personal, sino que también significó el regreso de la bandera albiceleste a los primeros planos de la categoría, algo que no ocurría desde el GP de Italia 2021 con Gabriel Rodrigo, otro piloto con raíces españolas que defendía la bandera de Argentina.
La celebración tuvo un detalle particular: por su edad, Perrone no pudo brindar con champagne, aunque compartió el momento con sus colegas en el podio. En sus declaraciones posteriores, agradeció con énfasis el apoyo recibido.
"Estoy realmente muy feliz por el equipo por todo, quiero agradecer al equipo, a mi familia… Fue una carrera muy loca, muchos sobrepasos, en un momento el grupo tenía 18 pilotos, quería estar hasta el final ahí para aprovechar en el cierre. Es un resultado fantástico. Gracias a todos los que me ayudaron durante tantos años", expresó con la emoción a flor de piel.
Desde su debut, el camino de Perrone no fue sencillo. No logró completar sus primeras tres carreras, pero desde entonces, cada competencia lo encontró sumando puntos y mejorando su rendimiento. Este crecimiento constante lo llevó a destacarse en una de las pistas más exigentes y emblemáticas del calendario.
Assen, conocida como la ‘catedral del motociclismo’, fue el escenario ideal para que el argentino demostrara su talento. En una carrera de múltiples sobrepasos y con un pelotón de hasta 18 motos peleando por posiciones, Perrone se mantuvo firme y supo capitalizar su momento en el final.
El joven, que además es fanático de River, ya se perfila como una de las promesas más firmes del deporte motor nacional. Su proyección entusiasma, y cada fin de semana parece reafirmar que su decisión de representar a la Argentina fue mucho más que una elección simbólica: es un compromiso con una nación que siente como propia.
