Qué es la estafa del código *21
El modus operandi de esta estafa comienza con un mensaje de texto (SMS) que simula ser del Banco Santander. En él, los atacantes informan que se ha cometido un error y que, por lo tanto, se ha depositado un préstamo en la cuenta del usuario.
Para solucionarlo, piden que se realice una transferencia de dinero, bajo la falsa premisa de que este monto debe ser devuelto inmediatamente. En el mensaje se advierte de la urgencia de la situación, buscando generar temor y apuro en la víctima para que actúe sin reflexionar.
Según la experta en ciberseguridad María Aperador, el fraude continúa con una petición aparentemente inocente: se solicita que el usuario marque un código específico seguido de un número de teléfono. Este es el punto crítico en la estafa.
Al marcar el código *21, la llamada que reciba el usuario es redirigida a los ciberdelincuentes, permitiéndoles tomar control de la conversación y, en muchos casos, de las transacciones realizadas. Esta táctica permite a los estafadores confirmar las transferencias bancarias de manera que la víctima no se da cuenta de que está siendo manipulada.
Lo más alarmante es que, una vez que la víctima realiza la transferencia, el dinero es enviado a las cuentas controladas por los delincuentes. A través de este fraude, no solo se roban fondos, sino también datos bancarios sensibles, lo que pone en riesgo la seguridad de la persona afectada.
Además, la información personal puede ser utilizada para realizar otras estafas en línea, lo que amplifica las consecuencias del robo.
Consejos para prevenir ser víctima de la estafa del código *21
Afortunadamente, existen formas de protegerse de este tipo de fraude. Los expertos recomiendan tomar algunas medidas preventivas para evitar caer en este tipo de engaños. Aquí te ofrecemos algunos consejos esenciales para protegerte:
- Desconfía de mensajes urgentes: Si recibes un SMS que te solicita realizar un pago o transferencia de forma urgente, verifica siempre el origen del mensaje antes de hacer cualquier acción. Los bancos no suelen pedir este tipo de operaciones de manera tan apresurada.
- No compartas datos bancarios: Nunca compartas información personal o códigos de seguridad por teléfono o a través de un mensaje de texto. Los ciberdelincuentes suelen usar estas tácticas para obtener acceso a tu cuenta.
- Evita marcar códigos sospechosos: Si te piden que marques un código en tu teléfono, asegúrate de que la solicitud proviene de una fuente confiable. Los bancos nunca te pedirán que realices este tipo de acciones.
- Monitorea tus cuentas regularmente: Revisa tus movimientos bancarios y activa alertas para detectar cualquier transacción sospechosa. Cuanto antes detectes un fraude, menos daño causará.
- Verifica la identidad del remitente: Si el mensaje proviene de un número desconocido o no oficial, deséchalo. Los mensajes legítimos de tu banco siempre provendrán de números cortos o direcciones de correo electrónico oficiales.
La clave para evitar caer en la estafa del código *21 es mantener la calma y no dejarse llevar por el pánico. Los ciberdelincuentes juegan con la urgencia y el miedo para que tomes decisiones rápidas sin pensar, lo que facilita su manipulación. Recuerda que los bancos nunca te pedirán que realices una transferencia para devolver un préstamo que no solicitaste.