Un colchón con sangre. Este fue el elemento que llamó más la atención a los investigadores que revisaron en profundidad la casa del pequeño Ariel Tapia en la villa Angelita en Santa Lucía.
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Un colchón con sangre. Este fue el elemento que llamó más la atención a los investigadores que revisaron en profundidad la casa del pequeño Ariel Tapia en la villa Angelita en Santa Lucía.
Las autoridades explicaron que las manchas no implican que sea la sangre del niño que desapareció, pero aclararon que peritarán las manchas para saber si la sangre pertenece a Ariel.
Pero eso no es todo, porque además del colchón los investigadores se llevaron una serie de notas que la madre del niño, Alejandra Silva y su pareja se intercambiaron en los últimos días. En los mensajes la pareja se recrimina que el menor esté perdido.
Por otro lado los investigadores recolectaron una serie de elementos que juntaron en una caja y también se los llevaron.
Además las autoridades del Ministerio de Desarrollo Humano se llevaron a los hermanos de Ariel de 18, 14 y 6 años para que declaren, al menos los dos menores podrán contar lo que saben en una cámara Gesell.
Las pesquisas en la casa de Ariel se hicieron después de un allanamiento en la vivienda de un vecino. Es que la madre del pequeño desaparecido habría dicho que el vecino tenía antecedentes por abuso y por eso las autoridades allanaron la vivienda ubicada enfrente de la casa de Ariel. Al parecer las autoridades no encontraron nada pero igualmente no descartaron seguir esa y otras líneas de investigación en la búsqueda del pequeño.