Además, indicó que son muy nutritivas y pueden sustituir a otros alimentos que suelen tomarse como picoteo y son mucho menos saludables por su alto contenido en grasas no tan buenas, como las harinas refinadas o azúcares.
Los cinco beneficios de las almendras para la salud
Aportan un alto contenido en grasas (en concreto, ácidos grasos monoinsaturados, que es el mismo tipo de grasa que se encuentra en el aceite de oliva) y proteínas vegetales.
Contienen fibra, minerales (calcio, fósforo, magnesio, hierro, zinc y potasio) y vitaminas (E, riboflavina, tiamina, niacina y folatos).
Pueden contribuir a la protección cardiovascular, específicamente por su alto contenido de grasas monoinsaturadas, fitoesteroles, magnesio, vitamina E y cobre.
La importante cantidad de fibra que contienen puede ayudar al tránsito intestinal y contribuir a la saciedad.
Cada almendra brinda un 10% de carbohidratos de absorción lenta, lo que es fundamental para ganar masa muscular.
Alto aporte de grasas y escasa cantidad de agua
“Su valor calórico es bastante elevado debido a su alto aporte de grasas y a la escasa cantidad de agua que presentan”, señaló González. Mónica Herrero, vicepresidenta del Colegio Profesional de Dietistas-Nutricionistas de Aragón, España, resumió otros posibles beneficios para la salud del consumo de almendras.
“Son también una de las mejores fuentes de magnesio dentro de los alimentos, contribuyendo al funcionamiento normal de los nervios y de los músculos, la síntesis normal de proteínas y el metabolismo energético, y reduciendo el cansancio y la fatiga”, expresó.