“Esto no es un misterio: es un desastre provocado por el hombre, una crítica moral y un fracaso de la humanidad misma. La hambruna no se trata solo de comida; es el colapso deliberado de los sistemas necesarios para la supervivencia humana. La gente se muere de hambre. Los niños mueren. Y quienes tienen el deber de actuar no lo hacen. Como potencia ocupante, Israel tiene obligaciones inequívocas en virtud del derecho internacional, incluido el deber de garantizar el suministro de alimentos y medicamentos a la población. No podemos permitir que esta situación continúe impunemente“, manifestó.
Y concluyó: “Basta de excusas. El momento de actuar no es mañana, es ahora. Necesitamos un alto el fuego inmediato, la liberación inmediata de todos los rehenes y un acceso humanitario pleno y sin restricciones".
Por su parte, el director de la Oficina de Asuntos Humanitarios de la ONU, Tom Fletcher, dijo que la hambruna en Gaza “podría haberse evitado” sin “la obstrucción sistemática de Israel”.
“Esta es una hambruna que podríamos haber evitado si nos lo hubieran permitido. Pero los alimentos se acumulan en las fronteras debido a la obstrucción sistemática de Israel”, declaró Fletcher en una rueda de prensa en Ginebra, añadiendo que “esta hambruna nos atormentará a todos”.
En tanto, el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, afirmó que “es un crimen de guerra utilizar el hambre con fines militares”, minutos después de que Naciones Unidas declarara oficialmente la hambruna en Gaza.
El anuncio se produjo en el marco de la escalada del conflicto en Gaza. El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, afirmó el jueves por la noche que dio instrucciones para el inicio inmediato de negociaciones con el objetivo de liberar a todos los rehenes y poner fin a la guerra en la Franja de Gaza bajo términos aceptables para Israel.
Según un comunicado en video difundido por su oficina, Netanyahu indicó que se encontraba en la División de Gaza para aprobar los planes militares destinados a tomar el control de la ciudad y derrotar al grupo terrorista palestino Hamas.
“Al mismo tiempo”, dijo Netanyahu, “he ordenado comenzar negociaciones inmediatas para la liberación de todos nuestros rehenes y para el fin de la guerra, en términos aceptables para Israel”.
El primer ministro subrayó la relación entre ambos objetivos: “Estas dos cosas, derrotar a Hamas y liberar a todos nuestros rehenes, van de la mano”. Netanyahu expresó su agradecimiento a los soldados de reserva y al ejército regular “por este objetivo vital”.