- Bajas calorías: Una clara de huevo grande contiene solo 17 calorías, en comparación con las 70 calorías de un huevo completo.
- Alta en proteínas: Aproximadamente 3,6 gramos de proteína por clara, lo que la convierte en una excelente opción para quienes quieren aumentar su ingesta de proteínas sin sumar grasas.
- Cero grasas y colesterol: Las claras no contienen grasas ni colesterol, lo que las hace atractivas para quienes tienen problemas de colesterol alto o buscan reducir la ingesta de grasas.
Beneficios de comer el huevo entero
1. Mayor saciedad y energía
El huevo entero aporta una combinación de proteínas, grasas y otros nutrientes que promueven la saciedad y mantienen la energía durante más tiempo. Esto puede ser clave para quienes buscan controlar su apetito o tener energía constante durante el día.
2. Mayor absorción de vitaminas
La grasa presente en la yema del huevo ayuda a que el cuerpo absorba mejor ciertas vitaminas liposolubles como la vitamina E, que se encuentra en alimentos como los vegetales. Un estudio ha demostrado que agregar un huevo a una comida rica en vegetales aumenta significativamente la absorción de estos nutrientes.
3. Protección del cerebro y los ojos
Los nutrientes de la yema, como la colina, luteína y zeaxantina, son esenciales para la salud del cerebro y la vista. La colina está relacionada con la función cognitiva y la prevención de enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer.
¿Cuándo elegir solo las claras?
Las claras de huevo son una excelente opción en ciertas situaciones:
- Dieta baja en calorías: Si estás en un plan de pérdida de peso o querés reducir tu consumo de calorías y grasas, las claras pueden ser una opción más ligera sin perder el contenido de proteínas.
- Problemas de colesterol: Si tienes colesterol alto y tu médico te recomendó limitar las grasas en tu dieta, eliminar la yema puede ser beneficioso temporalmente, hasta que regules tus niveles de colesterol.
- Alto consumo proteico: Para quienes buscan una alta ingesta de proteínas sin sumar grasas adicionales, como en el caso de los culturistas, las claras pueden ser una opción ideal.
¿Conclusión?
El huevo es un alimento increíblemente nutritivo, y tanto la clara como la yema tienen sus propios beneficios. Si no tenés restricciones dietéticas específicas, lo ideal es consumir el huevo entero para aprovechar todos los nutrientes que ofrece, desde las proteínas hasta las vitaminas y grasas saludables. Sin embargo, si buscás reducir calorías o grasas, o si tienes problemas de colesterol, consumir solo las claras puede ser una opción adecuada, al menos de manera temporal.
En resumen, el huevo entero es la opción más completa y nutritiva, pero dependiendo de tus metas de salud o estado físico, tanto las claras como la yema tienen su lugar en una dieta equilibrada. La clave está en ajustar según tus necesidades y objetivos.
FUENTE: TN