De la confección de la normativa participaron muchas áreas del equipo económico -Ministerio de Economía, Banco Central, ARCA y UIF- y sería anunciada este jueves. Se espera que la comunicación esté a cargo del vocero presidencial y candidato a legislador de La Libertad Avanza en la Ciudad, Manuel Adorni. También podrían participar otros funcionarios, aunque eso no está cerrado por el momento.
En los despachos oficiales destacaron que todo seguirá las recomendaciones del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI) en lo que respecta al origen de los fondos.
Días atrás, especialistas coincidieron también en que una opción para el nuevo esquema podría ser que toda persona que decida utilizar fondos no declarados presente alguna clase de trámite o declaración en la que afirme que los recursos no provienen de actividades ilícitas.
Desde el Gobierno evitaron dar más detalles, aunque confirmaron que ARCA trabaja en los aspectos finales de un decreto que flexibilice los controles para quienes usen dólares no declarados con un uso de consumo específico. No será un blanqueo en el sentido de que no se abrirá una ventana para declarar billetes y dejarlos depositados como atesoramiento. Apunta, más bien, a relajar la exigencia de información para este tipo de casos.
Por definición, hay dos leyes que actúan como control: la ley penal tributaria y la cambiaria. El Gobierno no podría cambiar ninguna de las dos por decreto o resolución, necesariamente debería pasar por el Congreso y no es la intención en este año electoral.
El blanqueo del año pasado permitió a los ahorristas regularizar USD 20.000 millones en efectivo, algo que dio impulso a las reservas y sostuvo la calma en el mercado de cambios. La última etapa concluyó el miércoles, pero en esa fase no estaba permitido exteriorizar efectivo.
FUENTE: Infobae