Cornejo se mostró especialmente a favor de reincorporar la cuarta categoría del impuesto a las Ganancias, al contrario de los gobernadores patagónicos, a quienes dijo “entender” sin dejar de mostrar su desacuerdo. “La mayoría de las provincias creemos que debe restablecerse. Es progresivo, no de los que gravan al consumo o la actividad económica, y la mayoría de los países del mundo lo tienen”.
El mandatario de la UCR confirmó su respaldo a pesar de que no conoce aún los pisos y categorías que quedarán vigentes en el proyecto del Ejecutivo, que prepara el ministro Luis Caputo y que iba a discutirse, según se había acordado el viernes pasado, entre los secretarios de Hacienda de las provincias y el nacional, Carlos Guberman. Los encuentros entre esos funcionarios técnicos aún no tuvieron lugar ni fueron programados.
El impulso a una reforma laboral es una de las principales incógnitas sobre la agenda del oficialismo. Circularon versiones fuertes la semana pasada de que Milei evaluaba incluirlo en el proyecto de ley para darle mayor legitimidad, para cumplir con el pedido del FMI para que busque “consensos” con el resto del arco político y lograr que avance tras el freno que le puso la Cámara del Trabajo a partir de las medidas presentadas por los gremios de la CGT.
La semana pasada, en el documento que le entregó a los gobernadores, el Gobierno había incorporado un punto específico sobre el blanqueo de trabajadores informales, pero sin mayores aclaraciones. En la Casa Rosada no informan aún si copiarán la reforma del DNU completa para sumarla a la ley Bases, o será un apartado menos ambicioso.
“El Ministro no dijo si iba a sumar la reforma laboral en la ley, tampoco lo hablamos. Pero la relación laboral también debe pasar por el Congreso. Si queremos crecer sostenidamente no se logra sólo con equilibrio fiscal, sino que también hay que hacer reformas que sean aprobadas en el Congreso”, marcó su posición el gobernador, que ayer se había manifestado en similar sentido en la cumbre de AmCham. Sin embargo, dijo que está dispuesto a ayudar al Gobierno a que se mantenga vigente el DNU que los opositores más distantes de la izquierda y el kirchnerismo intentan voltear.
Las posiciones están divididas en la UCR. Cornejo está alineado con el titular de la bancada radical, el cordobés Rodrigo De Loredo, y de la vereda opuesta se encuentran Martín Lousteau y Facundo Manes, muy críticos del gobierno nacional, que ya adelantaron que no acompañarán la cruzada por el decreto de Milei, que considera inconstitucional.
En paralelo al encuentro de Francos y Cornejo, la posición de apoyo a los libertarios entre los correligionarios ganó la pulseada, cuando se cayó por la sesión especial que había pedido Miguel Pichetto con apoyo del kirchnerismo, la CC de Elisa Carrió y los radicales críticos de LLA para tratar un proyecto alternativo de reforma previsional. Fue un triunfo para el ala del gobernador mendocino, que quiere darle herramientas a Milei para gobernar y se ubica cada vez más distante del sector que lidera Lousteau.