"Incluso cuando gano, como en Stuttgart o Halle, no es necesariamente la sensación que antes me producía, de felicidad, de motivación para seguir adelante. Perdí en la primera ronda, pero no creo que el tenis sea el problema. Es otra cosa que tengo que solucionar. Es difícil hablar de ello porque no tengo respuesta. Tengo un mes por delante hasta Canadá, veremos qué pasa hasta entonces, pero algo en mí tiene que cambiar y no es algo necesariamente en la pista de tenis", admitió consternado.
Stefanos Tsitsipas, otra caída en Wimbledon que provocó preocupación
El griego número 26 del ranking fue otro al que el traspié le disparó serias dudas sobre su rumbo en la vida y las expuso ante la prensa: “Estoy en un momento muy complicado. Es la situación más dura que he vivido como profesional. Estoy perdiendo confianza, salud y energía cada día que pasa. Llevo nueve torneos de Grand Slam seguidos sin llegar a semifinales. No es casualidad. Mi cuerpo no responde”, analizó quien viene padeciendo inconvenientes físicos de larga data.
“No puedo girar bien el cuerpo, no tengo potencia. En este deporte necesitás rotar. Si no podés rotar, no hay razón para estar ahí”, dijo sobre su dolencia en la espalda, y cerró lapidario: “Si esto sigue así, no tiene sentido competir. En algún momento tengo que ponerle un límite a todo esto. Dentro de un par de meses, si no veo una mejora, tendré que tomar decisiones”.