Debido a que se trata de una suma fija que pagan por igual tanto los menores como los mayores contribuyentes, el incremento de 38,63% tiene un impacto desparejo sobre los afectados. Por ejemplo: aquellos monotributistas que están enrolados en la categoría más baja (Categoría B, con ingresos anuales por hasta $48.000) sufrirán un incremento del 20 por ciento, ya que pasarán a pagar $519 en lugar de los $429 actuales. En cambio, un contribuyente de la Categoría F con una facturación mensual de $16.000 tendrá un incremento de 12,76% para aquellas personas que facturen bienes muebles y de 11,39% para quienes presten servicios.Los integrantes de la escala más alta entre los prestadores de servicio (Categoría I – facturación anual máxima de $400.000) tendrán una suba de apenas 4,52% (lo que llevará el pago a $2.080), mientras que entre quienes vendan bienes muebles (Categoría L – facturación anual hasta $600.000) el aumento será de 2,91% ($3.180).