Este viernes, la Justicia rechazó el pedido de prisión domiciliaria que hizo la mujer que usó a su hija de 10 años para robar en tres comercios al hilo. Andrea Yésica Palacios, que fue condenada con prisión efectiva, deberá seguir en el Penal de Chimbas.
La defensa fue quien pidió que Palacios cumpliera en su casa la pena de 4 meses de prisión efectiva que acordó semanas atrás en juicio abreviado por hurto agravado por la participación de una menor (3 hechos), en concurso real.
Sin embargo, el juez hizo lugar a la oposición que presentó el fiscal Cristian Catalano y resolvió rechazar el pedido de prisión domiciliaria. Además, ordenó que la condenada haga un tratamiento de rehabilitación para las adicciones en el área de Sanidad del Servicio Penitenciario Provincial.
Te puede interesar...
EL RAID DELICTIVO
Los tres hechos delictivos ocurrieron el pasado 11 de junio, en horas del mediodía, en locales comerciales ubicados en avenida Benavidez, a la altura de Rivadavia.
El primero ocurrió en un local de lencería mayorista, al cual ingresó Palacios junto a su hija de 10 años y otra mujer que no fue aprehendida. En el interior del comercio proceden a sustraer siete (7) calzoncillos tipo bóxer y cuatro (4) paquetes conteniendo, cada uno de ellos doce (12) bombachas para niñas y un (1) paquete conteniendo doce (12) conjuntos de ropa interior para niñas.
Luego, se dirigen hacia el cardinal oeste e ingresan a otro local, que es un outlet, a pocos metros; sustrayendo de su interior, tres (3) pantalones de jean color celeste claro.
Finalmente, continúan su raid delictivo hacia el cardinal oeste, ingresan a un tercer local de indumentaria; y de su interior sustraen distintos elementos, los que son introducidos en el interior de bolsas e incluso entre las prendas de vestir de las mujeres y niños. Este accionar es advertido por un cliente ocasional quien pone en alerta el propietario, brindándole datos de las dos mujeres (no así de la menor) siendo este cliente el primero en llamar al 911 para dar aviso de la situación.
El propietario sale de su negocio y comienza a buscar a las mujeres, alcanzándolas a escasos ciento cincuenta (150) metros del lugar. Increpa a las mismas y les solicita que le exhiban el contenido de un bolso que llevaban en su poder, dentro del cual solo había una campera propiedad de una de las mujeres. El dueño logra advertir que unos diez (10) metros delante de las mujeres iba caminando una menor de edad, de unos diez (10) años, la cual llevaba en su poder un bolso de tela plástica color blanco, no reparando en que era esta quien llevaba los elementos sustraídos, ello en razón de que la persona que lo alerta de los hechos, solo le mencionó a las dos mujeres y no a una menor. Finalmente vuelve a su negocio y comienza a revisar las cámaras de seguridad.
En ese momento, el operador en turno del CISEM, alertado por la llamada que realizó el testigo del hecho, comisiona a personal policial al interior del Bº Los Pinos. Allí un móvil con efectivos de la Comisaría 23ª advierte la presencia de la Srta. Palacios quien era acompañada por la menor (su hija de 10 años) siendo esta última quien llevaba en su mano un bolso de tela plástica de color blanco. Al descender del móvil policial para entrevistarlas, Palacios le arrebata de las manos el bolso a la menor y lo arroja al suelo. Preguntada sobre el contenido de dicho bolso, donde se advierten numerosas prendas de vestir y elementos de bazar y juguetería, siendo todos ellos nuevos, sin ningún uso; la mujer les manifiesta espontáneamente que los había sustraído de locales ubicados en Av. Benavidez. Le dan aviso a los propietarios de los locales, los cuales se hacen presentes en el lugar y reconocen como propios los elementos que Palacios y su hija llevaban en el bolso.