El campeón mundial Sergio Maravilla Martínez deja de lado por un rato el boxeo para apoyar una noble causa: ayudar a los chicos y chicas que son víctimas del bullyng.
Maravilla, que desde hace un tiempo ha izado la bandera de los más vulnerables, preside la Fundación lucha contra el Bullyng y desde ahí ayuda a los que sufren la discriminación de otras personas.
Martínez, un motivador por naturaleza, dejó de lado el último encuentro con Miguel Cotto y en Los Ángeles, plena presentación de la pelea, invitó a Nicolás Pérez para que subiera al estrado mientras realizaba declaraciones a la prensa.
El chico, víctima del bullyng, subió emocionado y con los ojos llenos de lágrimas y ante esa situación, el campeón mundial dijo: “Dedico esta pelea y el triunfo del 7 de junio al niño Nico Pérez, quien ha sufrido de bullying en su colegio. Lo de él no es un problema familiar. Es un problema social, y las autoridades y la sociedad deben trabajar juntas para enfrentarlo".
Martínez, en cuanto a lo boxístico, se medirá con el boricua el próximo 7 de junio en el mítico Madison Square Garden de Nueva York, donde expondrá por segunda vez el título mediano CMB que le arrebató a Julio César Chávez Junior el 15 de setiembre de 2012.
