Este tema se viene planteando desde diferentes sectores, principalmente desde los gremios de actividades vinculadas con la construcción del túnel ya que no tienen en claro si sus condiciones de trabajo se regirán por la normativa chilena o por la argentina.
Si se aplicaran las normativas del país trasandino esto resultaría desventajoso para los trabajadores argentinos ya que en éste país las normas son más favorables para los obreros y profesionales.
Ante estas diferencias, las autoridades de ambos países están estudiando elaborar un digesto en el que se establezca un cuerpo de normas que deben ser respetadas por ambos países, siempre en total acuerdo con los tratados de derecho internacional.
El ministro de Infraestructura, José Strada explicó que los miembros de la Ebitan (Ente Binacional Túnel de Agua Negra) aún están estudiando si finalmente se hará el digesto y agregó que en caso de que se determine que se debe hacer un cuerpo normativo comenzarán a trabajarlo a la brevedad para poder contar con el mismo lo más pronto posible.
Es que el Ebitan está trabajando en reuniones semanales para avanzar lo más rápido posible con todos los temas relacionados con el proceso licitatorio de la obra. Strada explicó que en la página web que se habilitó para que se inscriban las empresas interesadas ya hay más de 100 inscriptos y que más de una decena ya avanzó al segundo paso para poder convertirse en un oferente formal para la ejecución de este dos túneles que estará a más de 3.500 metros de altura sobre el nivel del mar, tendrá una extensión de casi 14 km y demandará una inversión de superior a los 1.000 millones de dólares.