Esta mañana en la sala I de la Cámara Penal de Tribunales, Carlos Limolle fue condenado a prisión perpetua por asesinar a su mujer, Alba Pizarro (35), con un golpe fatal en la cabeza luego de haberla golpeado en reiteradas oportunidades.
El tribunal comprendió que el sujeto salió del penal y la buscó para masacrarla dejándola tirada sin vida a la orilla de calle 18 y América, Pocito. El reo había comenzado a tener salidas transitorias luego de haber participado del crimen de Andrés González, en 2009.
Hoy fue encontrado culpable por homicidio agravado por el vínculo y quedará preso sin beneficios, según lo que dice la Ley de Ejecución Penal pese a que los beneficios deberán ser atribuidos o no por la Jueza Margarita Camus.
