Según informaron fuentes judiciales, la joven contó que estaba dormida cuando sintió ruidos en el exterior de su departamento. Cuando salió a mirar ya estaba en el interior su exnovio, Matías Ariel Sosa, conocido en el ambiente delictivo como “Pastelito”.
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Una vez que el acusado estaba dentro, la golpeó fuertemente contra una pared para luego patearla en diferentes partes de su cuerpo. La mujer mientras intentaba que el agresor se fuera fue atada con una remera y cuando logró salir del mono ambiente para pedir ayuda vio que su departamento comenzaba a prenderse fuego.
Es que según señaló, Sosa antes de escapar le quemó el inmueble y huyó en un remis. La víctima finalmente pudo ser contenida en el Centro de Abordaje de Violencia Intrafamiliar y de Género y junto a una profesional detalló que hacía un mes se había separado ya que durante toda la relación fue brutalmente golpeada.
La mujer además dijo que, “Pastelito” había cumplido una condena en el Servicio Penitencia de Chimbas por homicidio. En ese contexto de relación el acusado no solo ejercía violencia física sobre la víctima sino que también le prohibía que viera a su familia y amigos. “Nunca lo denuncié antes por temor, me decía que iba a matar a toda mi familia y a todos los que me ayuden. Él tiene antecedentes”, dijo ante la justicia.
Teniendo en cuenta la gravedad del caso se pidió una solicitud de allanamiento y detención del denunciado. Mientras tanto la mujer fue atendida en el servicio de Urgencias por presentar un fuerte dolor de cabeza.