Las fuertes ráfagas soplaron a unos 50 kilómetros por hora. Árboles y ramas caídas, cables y hasta un transformador tirados fueron parte de lo que dejó el fenómeno climático.
Antes del mediodía las ráfagas se hicieron sentir en Rivadavia, Rawson y Pocito, unas horas después arribó al centro de San Juan.
En las calles, se podía observar a la gente cubriéndose la cara por la cantidad de polvo en suspensión, las hojas hicieron lo suyo y hasta hubo caída de ramas, cables y postes de luz.