Las clases de apoyo fueron dictadas por cuatro tutores- dos profesores de lengua y dos de matemática- durante los días sábado en los principales establecimientos de la provincia y fueron clave para que los alumnos entre 12 y 18 años recibieran contención educativa y así evitaran llevarse la asignatura o repetir en muchos casos.
De los alumnos que fueron repitentes y que recibieron clases de apoyo en un 80% aprobaron la materia, mientras que los adolescentes que habían repetido y asistieron durante el 2017 lograron aprobar el año en un 60%. De este universo, hubo un número de estudiantes que tuvo que rendir después del 24 de diciembre y un dato no menor es que la mayoría reprobaron y no asistió a las mesas de exámenes.
De todos modos, desde el ministerio de Educación celebraron que el plan P.R.A.S.I.R haya dado buenos resultados, por lo que evalúan incorporar otras materias que complican a los estudiantes de las escuelas públicas.