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"Brenda puede descansar en paz porque mis nietos están bien conmigo"

Luego de la dolorosa pérdida de su hija, que fue asesinada hace poco más de tres meses, Laura Requena luchó por la custodia de los pequeños de 6 y 5 años y logró que hoy estén con ella. En este Día de la Madre le envió un mensaje a su hija para que finalmente descanse en paz.

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A poco más de tres meses del femicidio de Brenda Requena y tras una intensa lucha, su mamá Laura logró hace unos días parte de la custodia de sus nietos, los pequeños que la joven tuvo con Diego Álvarez, el presunto responsable de su muerte. Pese al profundo dolor que vive, podrá estar junto a sus nietos en este Día de la Madre y en diálogo con sanjuan8.com le envió un mensaje a su hija para que finalmente descanse en paz.

"Brenda sabe todo lo que yo hago por sus hijos. Que descanse en paz porque ahora mis nietos van a estar bien conmigo", expresó Laura con la voz entrecortada. Es que tras una intensa y difícil lucha, obtuvo parte de la custodia de los pequeños de 6 y 5 años.

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Hasta hace unos días, los padres del presunto asesino de Brenda tenían a los niños a cargo y, finalmente, la Justicia resolvió esta semana el pedido de Laura de la guardia provisoria de los hijos de la pareja. Tanto la nena como el nene estarán los fines de semana junto a su abuela materna mientras que permanecerán con los abuelos paternos el resto de los días. Este régimen permanecerá así al menos hasta que finalice el ciclo lectivo.

"Con los nenes estoy bien y me río, estoy fuerte para ellos, pero la procesión va por dentro", remarcó Laura. Los pequeños saben que su mamá falleció y aún les cuesta asumirlo, pero juntos trabajan el dolor para poder continuar.

Si bien obtuvo la guarda provisoria, Laura seguirá en la lucha para lograr la custodia definitiva de los nenes. El próximo paso de la Justicia en este camino, tras la finalización de las clases, será un examen psicológico a los pequeños y luego les consultarán con qué abuelos quieren vivir. Ante la ausencia de sus padres, la madre de Brenda aspira a quedarse con ellos y hacerse cargo de su crianza.

El padre de los pequeños, Diego Álvarez, fue procesado por homicidio doblemente agravado por el vínculo y por violencia de género contra Brenda, y permanece preso en el Penal a la espera de que su caso sea elevado a juicio.