La investigación por la muerte de un ciclista Lucas Álvarez, en Ruta 319 en los campos de Media Agua, sigue arrojando datos que llaman la atención de los investigadores y los inclinan a sospechar que no hubo intervención de un tercero. Lo que ocurre es que con el paso de las horas se van conociendo detalles de las pericias realizadas por el área de planimetría de Criminalística, sumado a los resultados de la autopsia forense.
Los primeros indicios marcaban la posibilidad de que no hubiera impacto de un tercer vehículo involucrado en la escena, ya que no había golpes en la bicicleta ni ralladas o material presumible sobre esa intervención. Es por eso que, los investigadores fueron muy sutiles al comunicar las razones de la muerte del joven con nacionalidad boliviana, en el marco de un hecho que fue confuso para muchos lugareños.
Te puede interesar...
Lo que ocurre es que, las primeras voces tomadas por la policía a los vecinos del lugar, marcaban que hubo una camioneta que -supuestamente- había impactado al joven y se había dado a la fuga. Sin embargo, la evidencia no mostraba tal maniobra como probable y por eso la autopsia iba a ser reveladora.
Leé: dudas sobre la muerte de un ciclista en Media Agua
Así fue como este lunes se conoció que el joven presentaba un golpe en su rostro, lo que le provocó un sangrado abundante, por el cual perdió la vida. Las dudas sobre la posibilidad de una colisión comenzaron a disiparse. Al parecer, por alguna razón el joven cayó de la bicicleta y el golpe fue letal.
Lo que intentan develar es, por qué razón el muchacho de 36 años cayó de la bici la madrugada del domingo en calle Dominguito y Las Higueritas, en el departamento del Sur.
Temas
Te puede interesar
-
-
-
-
Policiales