Detalles adicionales obtenidos de fuentes cercanas al caso y acceso al expediente revelan una situación aún más desgarradora. La joven tenía una disfunción de la glándula tiroides y no había menstruado regularmente en cuatro años, lo que contribuyó a su falta de conocimiento sobre el embarazo. Además, los exámenes de orina realizados en el hospital arrojaron resultados negativos, lo que aumentó la confusión sobre su condición.
El informe de autopsia reveló que el bebé, que habría estado gestándose durante aproximadamente 40 semanas, falleció debido a "muerte intrauterina" y presentaba un hematoma subdural en el cráneo, posiblemente causado por el uso de fórceps durante el parto.
El caso, que plantea serias interrogantes sobre posibles negligencias médicas y violencia obstétrica, está siendo investigado por la Unidad Fiscal de Norte de la 2° Circunscripción de la Provincia de San Juan, bajo la dirección de Sohar Aballay. Se han tomado declaraciones testimoniales tanto de la víctima como del personal médico involucrado, y se ha secuestrado la historia clínica de F.A.
A pesar de que la causa actualmente se está tratando como "averiguación por fallecimiento", se espera que la dirección del caso evolucione después de una pericia programada para el próximo lunes, en la que médicos forenses especializados y los profesionales que realizaron la autopsia del bebé participarán para arrojar luz sobre lo sucedido y determinar posibles responsabilidades. La comunidad espera con ansias respuestas y justicia para F.A. y su bebé.