"Hoy comencé un ayuno hasta que aparezcan mi hermano y los 43 tripulantes. Así que le pido al país que se unan porque creo que unidos un milagro se puede hacer", dijo desde la Base Naval de Mar del Plata.
Para Vallejos, la desaparición del submarino es un desafío de Dios que "nos pone a prueba para saber hasta dónde llega la fe del hombre".
Ante la consulta de si es posible que, después de 11 días desde la última comunicación, los tripulantes puedan estar vivos, no dudó: "Estoy segura de que sí".
"Creo que son profesionales y están preparados para cualquier cosa. Tengo fe de que están bien y están esperando que los encuentren y que los traigan a casa", expresó.
"Tenemos mucha fe de que van a volver. Hoy me toca ser la fuerte y acompañar a mi mamá, pero yo no siento un vacío dentro mío y creo que está bien y que está vivo", dijo acerca de su hermano.
Fuente: Minuto Uno