Tras el golpe de las PASO, Macri anunció algunas medidas para aliviar la situación de la clase media y de los más pobres, como la postergación de los aumentos de tarifas, un semicongelamiento del precio de los combustibles, la elevación del mínimo no imponible de Ganancias, la eliminación del IVA a una canasta de alimentos básicos y luego emprendió un recorrido por diferentes ciudades del país con actos que muchas veces se convirtieron en multitudinarios.
Por otro lado, Fernández, si bien es un veterano de la política y de la gestión estatal, es prácticamente un debutante en el rol de candidato. Tuvo sólo un lejano paso por la competencia electoral en alguna interna perdida en el peronismo porteño a fines del siglo pasado y luego fue elegido como legislador de la Ciudad en el 2000.
Macri, Fernández y Lavagna no son los únicos competidores para la presidencia. Nicolás del Caño, Juan José Gómez Centurión y José Luis Espert también llegaron a esta instancia.
Como en cada elección presidencial, esta vez también se renovarán la mitad de los diputados nacionales (se eligen 130 bancas en las 24 provincias) y senadores nacionales en ocho provincias. En ese caso, el peronismo y Juntos Para Cambio competirán por darle forma al Congreso de los próximos dos años y determinar qué poder tendrá la fuerza a la que le toque ser oposición.