Ni LeBron James ni Kobe Bryant. En medio del debate sobre quién es el sucesor de Michael Jordan, Kevin Durant demostró que es el máximo anotador y Chris Paul, el mejor director de juego: ambos lideraron el domingo el tercer triunfo seguido del Oeste sobre el Este en el All-Star de la NBA.
“Es un gran honor, pero con estos compañeros es fácil”, dijo Paul, base de Los Angeles Clippers, al recibir el premio de mejor jugador de las manos del comisionado de la NBA, David Stern.
Es el primer base en ser MVP desde que lo lograra Allen Iverson en 2005. Durant, por su parte, anotó 30 puntos y es el único jugador en la historia que alcanza 30 o más puntos en tres All-Star seguidos. Nadie había anotado tanto en sus cuatro primeras presencias en el fin de semana de las estrellas como el jugador de Oklahoma City Thunder.A Durant y Paul les acompañó Blake Griffin, autor de 19 puntos y de los mates más espectaculares durante la noche del domingo en Houston.
Es el tercer triunfo seguido del Oeste, por lo que iguala su mejor racha (2002-2004), y el cuarto de los últimos cinco. LeBron James, que al final del partido sufrió dos tapones de Kobe Bryant, también logró un nuevo récord pese a su discreto partido: anotó tres triples y ya es el jugador con más aciertos desde fuera del arco de la historia del All-Star al quedar con 23 y superar la marca de 22 de Ray Allen.Pero el duelo final entre Bryant y James dará que hablar. El jugador de Miami Heat no ocultó su malestar con el esfuerzo final en defensa de la estrella de Los Angeles Lakers, que esbozó una sonrisa tras los dos tapones.
El cara a cara en los minutos finales entre ambas estrellas fue lo único emocionante en un partido de escasa tensión. En el equipo del Este destacaron Carmelo Anthony (New York Knicks) con 26 puntos y Dwyane Wade (Miami Heat) con 21, así como los jóvenes Kyrie Irving (Cleveland Cavaliers) y Paul George (Indiana Pacers).
