El valor y las ganas de vivir sacaron a Federico Leonardi adelante. A cuatro meses del terrible accidente que pudo quitarle la vida se animó a contar sobre lo sucedido aquella madrugada del 12 de mayo cuando en calle Mendoza y Comandante Cabot todo se volvió negro.
“Sólo recuerdo que desperté en el hospital cuando estaba en Buenos Aires y dije: ¿qué hago acá? ¿Qué pasó? No entendía nada y tuvieron que contarme la historia. Yo no recuerdo absolutamente nada ni siquiera lo que viví durante ese día”, comenzó a contarle a sanjuan8.com.
Federico viajaba esa madrugada junto con su novia, cuando una camioneta que viajaba a altísima velocidad se cruzó de carril y lo chocó de frente, registrando el impacto en el lugar del conductor. Un grupo de amigos que venían en un auto atrás lograron ver lo sucedido y se lo manifestaron a la policía. Pese a esto, luego del accidente, desde la seccional, dijeron que no hubo testigos.
Los cuatro protagonistas del accidente, Federico, su novia Lucía y los dos jóvenes que ocupaban la camioneta que los chocó: de apellido Carbajal (19) y un menor de apellido Castro (15) quedaron inconscientes. Lucía volvió en sí gracias a la insistencia de sus amigos que la auxiliaron y luego fue operada de la nariz. Los ocupantes del otro vehículo quedaron gravemente heridos pero salieron adelante, tras haber sufridos fuertes golpes en la cabeza.
“No supe nada del conductor de la camioneta y para él no tengo palabras. No es que no lo perdone pero no quiero saber nada de él”, declaró Federico quien no recibió contacto alguno con los responsables de su estado de salud. “Sé que, según las pericias, mi velocímetro quedó en 40 km/h y el del otro vehículo quedó en 150 km/h. Yo tenía puesto el cinturón de seguridad y eso fue muy importante porque si no hubiera sido despedido del auto y me hubiera matado”, aseguró.
Hoy Federico debe seguir esforzándose por recuperarse y tiene cuatro meses más de rehabilitación, mientras eso sucede aprovecha para agradecer el impagable apoyo que recibió de la gente que lo quiere y de personas que no conoce: “Sentí mucha emoción cuando ingresé a Facebook y vi todos los que estaban rezando por mí. Hubo gente de Brasil y de Israel que me escribió y estoy muy agradecido por eso. Muchas gracias a todos!”, expresó.
Leonardi no tiene miedo de volver a manejar y cree que lo volverá a hacer pronto: “Se que no tuve la culpa de lo que pasó, pero les digo a los jóvenes que salen y toman alcohol que no manejen. Si lo van a hacer, que vayan despacio y que no hablen por celular. Pónganse el cinturón que les puede salvar la vida”, terminó.
