Bebidas gaseosas: Según una reciente investigación, estas bebidas afectan la forma en que la sangre circula en los genitales. Esto afecta la producción de los espermatozoides y la erección. Café: Este puede ser bueno si se bebe como medida, pero si se consume en exceso puede ser fatal. La cafeína afecta el conteo de los espermatozoides y causa problemas con la erección. Alcohol: Este hace que conseguir una erección sea mucho más difícil. Cuando se logra, esta no es lo suficientemente rígida. Además, es muy probable que el acto sexual sea más corto. Té de menta: Este tiene una gran cantidad de sustancias que afectan los procesos hormonales masculinos, especialmente la producción de la testosterona. Esto puede afectar el deseo sexual y la posibilidad de tener una erección.
Fuente: starmedia