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Hartas, un grupo de víctimas describieron terribles abusos del rockero Aldana

Lo primero que escuchó el músico rockero Cristian Aldana cuando bajó de la camioneta del Servicio Penitenciario Federal (SPF) fue: "Sos un violador", aunque dos segundos más tarde alguien le gritó: "Fuerza Cris, Dios te ama". Vestido con una remera del grupo Los Ramones y un saco color negro, el músico se sentó en el banquillo de los acusados y escuchó las siete denuncias de abuso sexual por las que se lo acusa, que podría significarle hasta veinte años de prisión.

Según el testimonio de las víctimas, que al momento de iniciar la relación con Aldana tenían entre 13 y 16 años, el cantante las sometía sexualmente, en algunas ocasiones con violencia, y luego las impulsaba a convencer a amigas para que participaran en tríos u orgías que él organizaba. Las obligaba a practicarle sexo oral, les introducía utensilios de cocina en la vagina y el ano y a menudo incorporaba a otros hombres en los encuentros sexuales con las menores.

Algunas de las inquisiciones que figuran en la causa son difíciles de explicar en estas líneas. La secretaria del TOC 25 fue la encargada de leer todas esas acusaciones, pero a medida que avanzaba en el relato debió detenerse para tomar agua y continuar. Cuando promediaba uno de los casos más escatológicos y violentos, la joven denunciante, protagonista de esas acciones, comenzó a llorar y a temblar, por lo que tuvo que ser retirada de la sala.

Desde temprano el ingreso a la sala del Tribunal Oral Criminal (TOC) 25 ya había movimientos por parte de los allegados al músico y de chicas que se acercaron para acompañar a las denunciantes. El juicio estaba planeado para que comience a las 9, pero luego se atrasó para las 11 y al final comenzó pasadas las 12.30 porque -según explicaron- el SPF no tenía móviles para trasladar al detenido.

Cuando llegó, Aldana bajó del móvil policial esposado y escoltado por tres policías con escudos. Con la cabeza gacha caminó hasta el ingreso mientras recibía insultos y también algunos mensajes de aliento. Una vez adentro de la sala Aldana se sentó a menos de 5 metros de distancia de las siete chicas que lo denunciaron. A pesar de la cercanía en ningún momento cruzaron sus miradas.

Lo primero que se hizo fue la lectura del pedido de elevación a juicio de las fiscales. En la acusación se detallaron los hechos sexuales y las circunstancias de tiempo y lugar en las que Aldana habría sometido a sus siete víctimas. Según lo determinado por las fiscales en la investigación penal, los episodios tienen un patrón común: las jóvenes eran fanáticas de la banda, menores de edad, sin experiencia sexual, que contactaban al cantante a través del blog de la banda.

Por tratarse de un caso de abuso -el tribunal integrado por Rodolfo Bustos Lambert, Ana Dieta de Herrero y Rodolfo Goerner- decidió que no haya público durante la declaración de las víctimas.

En la audiencia de este martes, durante unas dos horas, declaró una de las siete víctimas de los hechos por los que Aldana fue procesado. Respondió preguntas de la querella y de la fiscalía, pero la defensa de Aldana pidió un cuarto intermedio ante su turno para preguntar: "Es una forma de ganar tiempo. Ahora todo sigue en la audiencia del jueves", dijo Gabriela Conder, miembro de Gremial de Abogadas y Abogados de Argentina y patrocinante de esa víctima.

Durante su declaración, la víctima dio detalles sobre los abusos sexuales por los que denunció al ex cantante, a quien conoció cuando ella tenía 14 años. Según trascendió, el músico lloró: fue cuando la víctima contó que, al día siguiente de que su hermano muriera, Aldana la había golpeado y abusado sexualmente. "Casi todo el tiempo se mantuvo indiferente al escuchara a su víctima", sostiene Conder. En la audiencia del jueves, se espera que declaren más víctimas.

El cantante de "El otro yo" está acusado de abuso sexual con acceso carnal gravemente ultrajante y corrupción de menores en siete oportunidades. Aldana se encuentra con prisión preventiva en el penal de Marcos Paz e insiste en que "no existieron" encuentros sexuales con menores y que ni siquiera conocía a las denunciantes.

Si bien los abogados del cantante solicitaron su excarcelación, esta fue denegada por la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional, que entendió que la presunción de los delitos estaba fundada y que la libertad del imputado podía entorpecer el proceso.

La situación de Aldana comenzó a complicarse en abril de 2016, cuando se solidarizó en Facebook con las presuntas víctimas de abuso de su colega de "La Ola Que Quería Ser Chau", Miguel del Pópolo, y esto generó que sus víctimas se decidieron a denunciarlo.

Fuente: clarin

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