El principal operativo se concretó en la localidad de Puerto Rico, donde los efectivos detectaron un rastro que los condujo a un posible acopio de estupefacientes en la zona del arroyo Cuña Pirú, ubicado a un kilómetro de la costa del río Paraná.
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Al llegar al lugar, se constató que se trataba de un escondite donde los narcos depositaban la droga a la espera de ingresar al circuito del narcotráfico.
De esta manera, los uniformados se incautaron de 2.940 kilos de marihuana y el juez José Luis Casals, a cargo del Juzgado Federal de Primera Instancia de Oberá, dispuso el decomiso de la droga.
Simultáneamente, en Puerto Iguazú, la PNA halló ocultos en la maleza otros 95 kilos del mismo estupefaciente a la espera de ser recolectados por los narcos.
En total, secuestraron 3.035 kilos de marihuana fraccionada en panes con un valor de mercado que asciende a los 63 millones de pesos.
Télam
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