El seleccionado argentino masculino juvenil de vóleibol se adjudicó este viernes el título de campeón del mundo por primera vez en la historia de este deporte, luego de superar a Rusia por 4 a 2 en la final del Mundial Sub 23 que se desarrolló en El Cairo, Egipto.
En la familia Sánchez se respira vóley todo el día y el viernes no fue un día más. Rodolfo "Yeyo" Sánchez fue el entrenador de Obras en la última temporada y tuvo la chance de dirigir a sus dos hijos en la máxima división del vóley argentino. Matías, flamante campeón del mundo Sub-23, era el armador titular y su hermano Nicolás era su alternativa desde el banco de suplentes.
El Yeyo, papá de Matías Sánchez, el jugador campeón sanjuanino, brindó una entrevista exclusiva para N8 y se mostró emocionado: "nos corrían las lágrimas durante el partido".
"Tengo una alegría inmensa porque es un logro grandísimo el que obtuvo el equipo", declaró.
Por otro lado, afirmó que "es la tercera vez que Matías es considerado el mejor armador del mundo en esta categoría y es el mejor en su nivel".
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