Hace un mes, una mujer de 21 años, identificada como María Rosamond, fue atrapada por la Policía Federal Delegación San Juan mientras se encontraba vendiendo LSD en la plaza de la Joroba (Hipólito Irigoyen). Este martes, personal de la brigada de la misma Delegación encontró al proveedor en Córdoba y lo detuvo.
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Personal de la brigada de la Delegación San Juan de la PFA realizó una intensa investigación para establecer la procedencia de las 600 dosis de LSD (dietilamida de ácido lisérgico), una de las drogas más peligrosas del mundo, que fue secuestrada en el operativo del pasado 3 de agosto. De esta manera, se trasladaron a la ciudad de Córdoba para seguir los pasos de un sospechoso y, finalmente detenerlo en la vía pública, por orden del juez Federal Leopoldo Rago Gallo.