El Superclásico español no defraudó. En un encuentro que tuvo goles, tensiones y grandes emociones, Barcelona venció por 4-3 al Real Madrid en el estadio Santiago Bernabéu por la jornada número 29 de la Liga española.
Real Madrid saltó al campo de juego con una estrategia ambiciosa: atacar desde el primer minuto y, a la vez, presionar en la salida de su rival para que este no logre crear un circuito de juego eficiente.
Aún con ese planteo del elenco local, la primera chance de peligro fue para el Barcelona. Tras una salida rápida de contra de Macherano, Messi comandó el ataque a pura velocidad y metió un pase para Neymar, que sacó un disparo a las manos de Diego López. El equipo de Ancelotti respondió rápidamente con un remate de Benzema desde adentro del área que salió apenas afuera.
El encuentro tuvo un inicio vertiginoso, que pronto iba a tener la primera gran emoción. A los seis minutos, Lionel Messi se lució con una gran asistencia para dejar solo a Andrés Iniesta, quien metió un zurdazo inatajable para Diego López y decretó el 1-0 a favor del Barcelona.
Los papeles de Ancelotti se quemaron ante la rápida apertura del marcador por parte de los de Martino. El equipo Blanco debió apelar al talento de sus jugadores de ofensiva para internar torcer la historia, pero sus errores en el último toque limitaban sus posibilidades,
A los 11 minutos, Gareth Bale realizó una estupenda corrida para habilitar a Benzema, que sacó un débil remate que terminó en las manos de Víctor Valdes. Un minuto más tarde, el delantero falló en la definición luego de un gran avance de Ángel Di María para llegar al fondo por la izquierda.
Barcelona no se iba a quedar atrás e iba a ir en busca de la segunda conquista de la tarde. A los 14, Fábregas metió un gran pase desde atrás de mitad de cancha para dejar solo a Messi que, habilitado, enfrentó al arquero y definió apenas ancho. Luego, fue el argentino el que habilitó a Neymar, pero el brasileño se demoró en definir y, finalmente, sacó un remate suave que pegó en el cuerpo de Marcelo.
Pronto la historia iba a cambiar para los locales. Luego de un intento de Cristiano Ronaldo desde afuera del área que Valdes controló sin problemas, Di María se iba a convertir en una pieza clave y Benzema iba a afinar la puntería.
Iban 20 minutos cuando el rosarino avanzó por la banda izquierda y sacó un centro que Mascherano no llegó a cortar. Por detrás iba a aparecer Benzema para conectar un cabezazo letal que se convirtió en el 1-1.
